Una gran parte del territorio del sur del país, afectado la semana pasada por la rotura de del dique de Kajovka, se encuentra en situación de extrema dificultad. Desde el primer día, Caritas-Spes lleva a cabo una incesante labor de socorro en los pueblos inundados y presta ayuda humanitaria a la población desplazada. El director, Padre Vyacheslav Hrynevych: «Estamos preparados para una recaudación de fondos especial, pero muchas personas de las zonas ocupadas no pueden abandonar sus hogares».