Tras el misil disparado por los rebeldes yemeníes, que ayer impactó en la zona de la Terminal 3 del aeropuerto de Tel Aviv causando seis heridos leves, los Houthis denunciaron los ataques aéreos estadounidenses contra la capital, Saná, y amenazaron con otros lanzamientos contra Israel. Mientras tanto, Irán ha presentado un nuevo misil balístico de combustible sólido con un alcance de 1.200 kilómetros