Ivanka Velychko y Mila Leonova, ambas trabajadoras de Cáritas Donetsk, con sede en la ciudad ucraniana, hablan de las labores de socorro a las víctimas del bloque de apartamentos alcanzado por un misil el sábado: la gente está devastada, pero la ayuda mutua entre todos nos ha unido en un vínculo que resulta consolador.