La audiencia del Papa Francisco con miembros del Grupo del Partido Popular del Parlamento Europeo estaba prevista para el 9 de junio en el Vaticano. Dado que el encuentro no tuvo lugar, el Santo Padre envió un mensaje desde el Hospital Gemelli a su presidente, Manfred Weber, en el que pide a los parlamentarios una fuerte toma de conciencia de la responsabilidad de los políticos cristianos «para traducir el gran sueño de la fraternidad en acciones concretas de buena política a todos los niveles»