Monseñor Giambattista Diquattro, jefe adjunto de la delegación de la Santa Sede —encabezada por el cardenal Parolin— que participa en la Conferencia de la ONU sobre el cambio climático en Belém, afirma: “Es necesario dar una señal concreta de esperanza. Que esta Cop sea un punto de inflexión y exprese una voluntad política clara y tangible, que lleve a una decidida aceleración de la transición ecológica mediante formas eficientes, vinculantes y fácilmente verificables”.