Al recibir en audiencia a los participantes en un encuentro de empresarios latinoamericanos el Papa Francisco les recomendó defenderse de las «sombras del mal», cuando la búsqueda exclusiva de la lógica del beneficio lleva a envilecer y esclavizar a las personas. La invitación fue a tejer redes, favorecer la ayuda mutua, evitar conflictos, conscientes «de que detrás de cada trabajador hay una familia, y toda la sociedad»