El Papa León XIV llega a İznik para hacer una pausa junto a la Basílica de San Neófito, reaparecida en los últimos años de las aguas del lago. Aquí, donde la historia y la fe convergen, el Sumo Pontífice se encuentra con el Patriarca Ecuménico Bartolomé I y recorre los vestigios de una ciudad que fue cruce de caminos de doctrina y martirio. Las investigaciones recientes devuelven un paisaje que sigue interpelando sus orígenes.