, 08 Feb. 23 (ACI Prensa).-
La película “Si todas las puertas se cierran”, impulsada por las Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor, entra en la fase final de su producción. Sus ingresos serán destinados a “la liberación de las mujeres que se encuentran en contexto de prostitución”.
El largometraje dirigido por el reconocido director español Antonio Cuadri ya enfila la recta final antes de su estreno en el mes de abril.
La producción se enmarca en los actos de celebración del 200 aniversario del nacimiento de la fundadora Antonia María de Oviedo y Schönthal.
Las Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor están presentes en 15 países del mundo, donde desde hace 150 años desempeñan la misión de defender los derechos de las mujeres explotadas sexualmente y víctimas de la trata.
La película cuenta la historia de tres mujeres, entre ellas la fundadora, separadas por el espacio y el tiempo, pero unidas al fin por un proceso interior común que las lleva a enfrentarse a sus miedos.
“Nos encontramos en la recta final para la llegada del largometraje a la gran pantalla y damos los últimos pasos para cubrir los gastos destinados a la promoción y difusión de la película”, explican las hermanas oblatas en su sitio web.
Con este objetivo han puesto en marcha una campaña de recaudación de fondos que aspira a alcanzar unos 8 mil dólares que serán destinados a cubrir las tasas de los festivales en los que quiere ser presentada y en las labores de subtitulado.
También se pretende afrontar los gastos derivados de la producción de materiales de promoción y la visibilización del trailer en las redes sociales.
Jornada mundial contra la trata
La Jornada mundial de oración y reflexión contra la trata de personas es un evento promovido por el Papa Francisco cada 8 de febrero cuyo lema este año es “Caminando por la dignidad”.
En 2015 el Papa estableció que coincidiendo con esta jornada se celebrara la memoria litúrgica de Santa Josefina Bakhita. Tra ser esclava y víctima de torturas se hizo religiosa y “se convirtió en santa y en símbolo universal del compromiso de la Iglesia contra la esclavitud”, según afirmó el Papa.
En su mensaje para la jornada de 2023 el Pontífice ha exclamado: “¡La trata de personas es violencia! La violencia que sufre cada mujer y cada niña es una herida abierta en el cuerpo de Cristo, en el cuerpo de la humanidad entera, es una herida profunda que también nos concierne a cada uno de nosotros”.