Una ley parlamentaria dictaminó el pasado 28 de enero que se suspendan todas las relaciones con la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina. La decisión fue apoyada por Estados Unidos. El primer ministro israelí, Netanyahu, anunció que ha recibido una invitación para visitar la Casa Blanca el 4 de febrero: sería el primer líder en reunirse con Donald Trump.