Los dos fenómenos meteorológicos han azotado seis estados, de norte a sur, destruyendo viviendas, escuelas y hospitales. Médicos Sin Fronteras (MSF) trabaja sobre el terreno y, a través de José Luis Michelena, director ejecutivo de la ONG para México y Centroamérica, declaró a los medios del Vaticano: «Las comunidades están total o parcialmente aisladas, y muchas han perdido todas sus pertenencias».