Monseñor Pierre-André Dumas, obispo de la diócesis de Anse-à-Veau-Miragoâne y vicepresidente de la Conferencia episcopal haitiana, expresa su dolor y esperanza ante la dramática situación en la que se encuentra el pueblo, que se enfrenta a la pobreza, la violencia de las pandillas, la corrupción y la debilidad institucional.