El Prefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales, en un mensaje al Patriarca Pizzaballa, habla de la tragedia que se desarrolla en Gaza ante la que permanecemos en la ventana mirando. Califica de «inhumano» el ataque israelí a la parroquia católica de la Sagrada Familia, donde encuentran refugio cientos de personas desarmadas: un acto que viola el antiguo derecho de asilo.