Asesinado en 2005 durante la oración vespertina, el fundador de la comunidad monástica cristiana ecuménica internacional sigue siendo un ejemplo de paz y reconciliación. El prior, el hermano Matthew, declaró: «Nuestra comunidad se fundó durante la Segunda Guerra Mundial, y esto nos ha enseñado a estar cerca de todos los pueblos que sufren, como los de Ucrania y Tierra Santa».