En los numerosos llamamientos lanzados al término del Ángelus, el Pontífice se detiene en la tragedia ocurrida el 27 de agosto en la Annunciaton Catholic School, invitando a rezar por los niños fallecidos y a detener el uso de las armas.
En los numerosos llamamientos lanzados al término del Ángelus, el Pontífice se detiene en la tragedia ocurrida el 27 de agosto en la Annunciaton Catholic School, invitando a rezar por los niños fallecidos y a detener el uso de las armas.