En la homilía de la Misa en sufragio de Francisco, en el segundo de los Novendiales, el cardenal Parolin recordó que el propio Pontífice había dicho al mundo que «nunca podrá haber paz si no aprendemos a perdonarnos unos a otros». A los numerosos jóvenes presentes en la Plaza de San Pedro, la invitación a mirar a la verdadera esperanza que es Jesús