Al término del Ángelus, León XIV pide a los más pequeños que recen ante el belén y luego bendice a sus Niños Dios, como es tradición en el cuarto domingo de Adviento.
Al término del Ángelus, León XIV pide a los más pequeños que recen ante el belén y luego bendice a sus Niños Dios, como es tradición en el cuarto domingo de Adviento.