Una reunión de tres días organizada por la Federación de Conferencias Episcopales de Asia se centra en los retos que plantea la inteligencia artificial y en la necesidad de dar prioridad a la educación y la alfabetización mediática como garantías de la libertad humana: «La Iglesia debe ayudar a los creyentes a seguir siendo plenamente humanos en una era digital que puede moldear el pensamiento y la memoria».