Mientras la UNICEF celebra el Día Mundial de la Infancia, millones de niños y niñas en todo el mundo viven en condiciones extremas, como la guerra, el hambre, los desastres naturales y la falta de educación. Esta tendencia empeora constantemente: se prevé que en las próximas décadas estarán cada vez más expuestos a los conflictos y a los efectos del cambio climático en África.