El Secretario de Estado, en la Cumbre del Clima previa a la 30ª Conferencia de las Naciones Unidas en Belém, Brasil, reiteró ante los medios vaticanos el compromiso de la Santa Sede y las Iglesias locales de dar una respuesta ética al cambio climático, un tema que, según afirmó, podría convertirse en una oportunidad para revitalizar el multilateralismo en crisis. El cardenal también expresó su preocupación por el número de personas desplazadas en la actualidad.