El Proprefecto del Dicasterio para la Evangelización y Gran Canciller de la Universidad Pontificia celebra la Misa en la Basílica de San Pedro con motivo del Jubileo universitario. Invita a todos a vivir plenamente el evento —«los selfis con otros peregrinos no garantizan una auténtica peregrinación»— y a difundir el Reino de Dios «de libertad y luz» frente al mal. El corazón del Señor se conmueve por las víctimas «de la corrupción, la violencia y los conflictos armados».