La decisión de abandonar la agencia de la ONU que apoya la educación, la ciencia y la cultura, al tiempo que promueve la preservación del patrimonio artístico y natural en todo el mundo, se produjo después de que el diario nicaragüense «La Prensa» fuera galardonado con el Premio Unesco a la Libertad de Prensa: el periódico más antiguo del país se dedicó a denunciar al gobierno del actual Presidente Ortega.