La organización recuerda que el número de adolescentes y mujeres embarazadas y en periodo de lactancia que sufren malnutrición aguda ha pasado desde 2020 de 5,5 millones a 6,9 millones, un aumento del 25%, en los doce países más afectados por la crisis alimentaria y nutricional mundial. Andrea Iacomini, portavoz de Unicef Italia: «Todos los avances que habíamos logrado se han quedado parados durante ocho años porque no hemos invertido en salud materna y neonatal».