, 16 Mar. 23 (ACI Prensa).-
Los seminarios españoles están cada vez más vacíos. Según datos oficiales de la Conferencia Episcopal Española (CEE), en el curso 2022-2023 el total de aspirantes al sacerdocio no alcanza el millar por primera vez.
Cada 19 de marzo Solemnidad de San José, la Iglesia Católica celebra el Día del Seminario. Con este motivo, la CEE ofrece los datos de seminaristas: 974 son los candidatos al presbiterado diocesano.
Los ingresos también han caído por primera vez por debajo de los 200 (172) y las ordenaciones efectuadas están por debajo del centenar (97).
Se trata de cifras significativas, si bien la tendencia desde hace años era descendente. No en vano, había cerca 1.700 seminaristas en el curso 2002-2003, cuando ingresaron más de 350 y se ordenaron casi 200.
Ya en el curso 2016-2017 el número de aspirantes al presbiterado cayó por primera vez por debajo de los 1.300 y en el curso 2018-2019 apenas fueron 1.203.
La Subcomisión Episcopal para los Seminarios explica que la bajada de 54 seminaristas respecto al curso 2021-2022 “se explica entre otras cosas, por la nueva metodología en la recogida de los datos, que por primera vez ha sido nominal, y ha estado a cargo de la Oficina de Transparencia de la Conferencia Episcopal”.
También se reseña la necesidad de tener presente “la secularización y la falta de compromiso por parte de no pocos jóvenes, que también se reflejan en otros datos estadísticos, como en el número decreciente de matrimonios -tanto civiles como eclesiásticos”.
A estas causas habría que añadir el gravísimo problema demográfico que sufre España, donde nacen cada vez menos niños y la población se envejece cada vez más.
A pesar de los datos decrecientes, desde la CEE se anima a “estar agradecidos de que un número significativo de jóvenes vivan comprometidos en la búsqueda de la voluntad de Dios, que nos invita a abrazar una vocación preciosa en su Iglesia”.
A consecuencia de la gravedad de los datos, la CEE puso en marcha en septiembre de 2022 el Servicio de Pastoral Vocacional, dependiente de la Secretaría General y que tiene por objetivo “ir creando en nuestra Iglesia que peregrina en España una cultura vocacional que ayude a que niños, jóvenes y adultos se planteen su vocación”.