La «Fratelli tutti», considerada uno de los frutos más significativos de los diez años de pontificado del Papa, como profecía, guía y meta para un camino de diálogo entre las religiones y de amistad. La encíclica se convierte en experiencia concreta gracias al camino educativo con los musulmanes llevado a cabo por la Escuela Terra Sancta de la Custodia de Tierra Santa: nuestro hábito es garantía de respeto.