República Checa, carmelitas convierten una granja abandonada en monasterio

En Drasty, a las afueras de Praga, una comunidad de monjas trabaja en la construcción de un nuevo monasterio. Con la ayuda de voluntarios, las religiosas rehabilitaron una zona reducida a vertedero conduciendo tractores, arrancando maleza y cortando plantas muertas con motosierras. Una empresa constructora levantó los nuevos edificios. Ahora continúan con las obras en el interior, confiando en la Providencia y esperando que un día el convento «irradie vida a todo el entorno».

Leer todo

 

Comparte en tus redes
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Configurar y más información
Privacidad