A 25 años de la firma del Acuerdo del Viernes Santo, que puso fin a la violencia que había ensangrentado a Irlanda del Norte, el Pontífice lo recordó al terminar el rezo del Regina Caeli y deseó el robustecimiento de la paz en la isla.
A 25 años de la firma del Acuerdo del Viernes Santo, que puso fin a la violencia que había ensangrentado a Irlanda del Norte, el Pontífice lo recordó al terminar el rezo del Regina Caeli y deseó el robustecimiento de la paz en la isla.